Dos días viviendo muerta.
Dos días sin hablar con él.
Dos días sin él.
Dos días sin su sonrisa.
Dos días sin su mirada.
Dos días sin oír su risa.
Dos días sin escuchar palabras de su boca.
Dos días lamentándome.
Dos días culpándole.
Dos días que parecen años.
Se me revuelve el estómago solo pensar que esto podría durar toda la vida, toda una vida sin vivir.
Nuevas lágrimas en mi rostro. Abro delicadamente mi joyero. Me mito en el espejo. Que veo? Una niñata cobarde que no sabe hablar las cosas. Se ha corrido el maquillaje. No estoy en mi mejor momento que digamos.
Él: No voy a pasar de ti, peor aún, olvídate de mi porque no pienso dirigirme a ti en mi vida. Como te acerques a mi te voy a poner una cara de odio que no vas a olvidar nunca.
Cada letra era una daga en el corazón. No hay nada peor que perder un amigo, un bien amigo.
Tengo miedo de mirarle, tan solo por esa cara de la que me habló. Tengo miedo ver en sus ojos verdadero odio.
Siento a veces que debería acercarme a decirle algo pero es horrible, tan solo verle con expresión de asco...
Espero de veras algún día pase esto.
La difunta Pervinca . Descanso en paz, querido amigo.
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